En el Pirineo continuamente encontramos barrancos secos, por donde sólo corre agua tras lluvias o nieves. Estos cañones se formaron hace miles de años, tras la última glaciación, cuando por el Pirineo descendía muchísima más agua que hoy en día. Algunos de estos barrancos son realmente bellos, gracias a sus marmitas, pasillos pulidos y rapeles realmente grandes. Los barranquistas los descienden sin agua habitualmente, así es posible admirar su belleza aunque si se consiguen descender en primavera, en el momento preciso en el que el agua vuelve a correr por sus cascadas, aparte de su belleza se disfrutará muchísimo más.
En este blog la Cooperativa de Guías del Pirineo ofrece 5 descensos para todos los públicos, que durante la estación de las flores ofrecen su cara más hermosa.
Barranco de Abizanda
Abizanda / Nivel iniciación
Aproximación 5 min / recorrido 1h 30 min / retorno 45 min
El barranco de Abizanda es una opción ideal para primavera en Aínsa, tanta para familias aventureras como grupos que quieran iniciarse en el descenso de cañones.
El pueblo de Abizanda, entre el Sobrarbe y Guara acoge una arquitectura tradicional muy bien conservada, su espectacular torreón data del S. XI, totalmente recomendable complementar la actividad de barranquismo con la visita a este pueblecito.
Bajo la villa surgen dos murallas de roca partidas por el barranco de Abizanda, una breve aproximación da inicio a un barranco muy variado dividido en tres partes engorgadas. Cuenta con varios rapeles, toboganes, destrepes, tramos muy divertidos por los que se camina entre marmitas muy bonitas. Se alternan partes más frías con tramos muy soleados, eso sumado a su final en las cálidas aguas del pantano de El Grado lo clasifica como un descenso poco frío.
Los últimos oscuros del barranco son muy hermosos y con agua divertidos, la roca caliza esta perfectamente pulida y los rapeles aunque sean sencillos divierten a toda la familia.
Un barranco primaveral cercano a L´ Aínsa muy bonito y para todos los público
Barranco Basender y Portiacha
Lecina / Nivel iniciación-medio
Aproximación 20 min / recorrido 4 h / retorno 1 h
El Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, situado entre Huesca y los Pirineos aragoneses, alberga una de las mayores concentraciones de barrancos deportivos del sur de Europa. Su clima mediterráneo otorga a la sierra un verano poco lluvioso y cálido, este clima seca gran parte de los descensos desde el mes de julio, por lo que el mejor momento para disfrutar del barranquismo en Guara es la primavera, donde todos sus cañones lucen su mejor versión.
Uno de los clásicos de la Sierra de Guara es la combinación del barranco Basender y Portiacha, secos salvo tras grandes lluvias, aunque con tramos acuáticos para cruzar el vero durante su retorno; cómodos, bien equipados y con rapeles variados de hasta 30 metros que enseñan a dominar esta técnica clave en el barranquismo.
Desde el bonito pueblo de Lecina, famoso por su encina milearia, una pequeña caminata permite comenzar la aventura en el Basender, sus siete rapeles entre tramos muy engorgados y otros más abiertos hacen de este barranco uno de los descensos secos, de iniciación, más bonitos de la península ibérica. Durante todo el año, grupos familiares pueden disfrutar de este barranco de la Sierra de Guara.
Tras finalizar este primer cañón, para acceder al Portiacha hay que recorrer el cauce del río Vero, mojándose los pies en varias ocasiones, tras 30 minutos de caminata se llega al parking del Portiacha, un barranco tan breve como espectacular, con dos grandes rapeles volados, más técnicos que los del Basender, aunque cualquier persona aventurera puede realizarlos con la seguridad de ir acompañado de un guía de barrancos. Se vuelve al curso del Vero para finalizar la actividad regresando a Lecina por el Sendero de las Escaleretas, camino de uso tradicional pastoril, que a través de fajas colgadas en el vacío asciende la muralla del río Vero, para seguridad de las personas está equipado con línea de vida, como si se tratara de una vía ferrata.
Foz de la Canal
Bielsa / Nivel medio
Aproximación 50 min / recorrido 4 h / retorno 10 min
El valle de Bielsa y sus montañas, Circo de Pineta, Monte Perdido, ofrecen a sus visitantes algunas de las panorámicas más alpinas de los Pirineos.
Con una interesante mezcla de rocas calizas y graníticas, este valle ofrece barrancos variados, cuenta con pulidos toboganes de hasta 15 metros (barranco Barrosa) y descensos alpinos de grandes rapeles (barranco Fuen Blanca). Es un destino obligado de barranquismo en el Pirineo.
Los barrancos alpinos de estas montañas se caracterizan por su verticalidad e intensidad, donde los grandes rapeles son los protagonistas junto con unas vistas increíbles durante los descensos.
El barranco de la Foz de la Canal en Bielsa, es un bonito ejemplo de barranco alpino, un entorno boscoso entre pinos y abetos, grandes rapeles acuáticos, panorámicas y en un entorno engorgado y excavado.
La descripción de tiempos de este blog corresponde a la parte inferior del descenso, apta para cualquier persona acostumbrada a la actividad física, con ganas de grandes rapeles. Personas con experiencia previa en barrancos pueden ascender más por la pista de acceso para realizar la actividad integral, añadiendo algunos rapeles más de inicio y un gran rapel volado de 80 metros.
Durante la primavera pirenaica este descenso muestra su versión más acuática, al no tener pozas no es muy frío, lo que permite disfrutar cada uno de sus rapeles mientras se observa la explosión de la primavera.
Consusa Inferior
Revilla/ nivel avanzado
Aproximación 10 min – recorrido 4 h – retorno 45 min
El barranquismo en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido está prohibido, con el objetivo de conservar la biodiversidad de sus aguas. Pero en los alrededores de este increíble entorno que es Ordesa se encuentran algunos de los barrancos más espectaculares…en Pineta se sitúa el barranco de Lalarri, en Añisclo la Garganta de las Gloces, en Ordesa los cañones de Bujaruelo y en Escuaín uno de los descensos más hermosos del panorama nacional, Consusa.
La Garganta de Escuaín es un tesoro salvaje dentro del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, alejado de aglomeraciones veraniegas y pueblos repletos de multitudes; en pleno verano es posible recorrer sus senderos a solas, pernoctar en la hermosa cabaña de Foratarruego observando a los Sarrios en su hábitat y alojarse en pueblos tan pirenaicos como Revilla.
El barranco Consusa inferior es una joyita primaveral, con agua durante el deshielo y precipitaciones, aunque su belleza obliga a que los barranquistas lo desciendan con caudal de estiaje, durante la primavera ofrece su versión más deportiva y divertida, siempre tomando las precauciones necesarias, contar con un guía de barrancos local permitirá disfrutar al máximo del descenso con seguridad así como conocer sus curiosidades.
Una corta aproximación sitúa a los aventureros barranquistas sobre el puente del barranco, marcador tradicional de su caudal. Multitud de rápeles y saltos (cuando el caudal lo permite) sin descanso, hacen que este descenso sea una delicia sin descanso. Sus paredes calcáreas tremendamente excavadas crean pasajes de gran belleza, incluso en algún tramo nos parecerá que nos introducimos en una cueva. Los rapeles finales sobre el río Yaga tienen una panorámica asombrosa sobre las montañas del Sobrarbe.
Barranco del Cebollar y Salto Carpín
Torla/ nivel avanzado
Aproximación 40 min – recorrido 4h – retorno 5 min
Durante la primavera, el valle de Bujaruelo muestra la versión más salvaje del río Ara, detenerse sobre sus puentes a escuchar su rugido sobrecoge a cualquiera. Desde el puente de Santa Elena sorprende una larga cascada que vuela sobre el vacío, afilada y gigante, su nombre es famoso entre los barranquistas, se trata de una de las grandes verticales del Pirineo, el Salto Carpín.
Realizar barranquismo junto a un guía de barrancos en Bujaruelo, ofrece descensos con mucho renombre, clásicos de la península ibérica, que se disfrutan desde el mes de abril hasta las lluvias de otoño. En primavera los barrancos alpinos, como el Carpín, Lapazosa o Gabieto se llenan de agua tras el deshielo. Durante el verano el barranco del río Ara, Ordiso ofrece muchísima agua para los aventureros que quieran saltar y nadar por uno de los barrancos más caudalosos de la península ibérica. Un guía profesional de barrancos ofrece el mejor descenso del valle, en su mejor momento y con total seguridad.
La aproximación a este barranco por los bosques del Cebollar ya da una idea del desnivel que va a salvar el descenso, entre viejos bosques de abetos y pinos se sube poco a poco hasta comenzar la aventura. Poco a poco el barranco presenta rapeles más o menos técnicos entre pasillos muy engorgados, para lo que suelen ser los barrancos alpinos. Los rapeles van ganando en longitud, ideal para calentar ante la gran vertical que pone el broche de oro al descenso.
El Salto Carpín se puede rapelar por sus dos márgenes, lo más cómodo para evitar el activo es realizar tres rapeles por la margen izquierda. El primer pasa manos colgado a más de 100 metros sobre el río Ara es, sin duda, uno de los rincones del barranquismo pirenaico más sobrecogedores. El primer rapel tiene un péndulo sencillo, para caer en volado a la faja en el segundo rapel, para recuperar con comodidad será necesario gestionar el rozamiento. El tercer rapel también requiere mucha gestión del roce, para salvaguardar la integridad de las cuerdas. Tras llegar al suelo la panorámica en asombrosa bajo la cascada.
Uno de los grandes barrancos de los Pirineos.
Realizar barranquismo en Torla ofrece a todos los públicos la posibilidad de disfrutar del agua y la naturaleza en el corazón de los Pirineos.
Sobre nosotros
Somos una cooperativa de guías de montaña, barranquismo y escalada, afincada en el corazón del Pirineo, el Sobrarbe. Nuestra pasión es explorar los entornos más salvajes, realizando actividades que no solo desafían nuestros límites, sino que también promueven el respeto por la naturaleza y cultivan la pasión por los deportes de montaña. Cada expedición es una oportunidad para aprender, superar límites y crear recuerdos imborrables.














